




Nos quedamos en Puerto Iguazú, en la parte de Argentina, porque seguramente hubiera sido más seguro y barato que Brasil. Estuvimos en un hostal llamado Lolita que costaba 50 pesos la noche. Estaba bien porque teníamos cocina y tele en el salón. Además, estaba cerca del terminal de guaguas y de la tienda donde íbamos a comprar el desayuno y el almuerzo todos los dias. Tambien teníamos internet gratis.
El primer dia como siempre, pues no hicimos mucho. Caminamos y conocimos la ciudad, y vimos los posibles tours para ir a ver las cataratas. Al final todo el mundo nos dijo que no nos hacía falta un guía ni nada, que podíamos ir solos con la guagua del pueblo. Para poder ir a las de Brasil sólo tuvimos que sellar el pasaporte de salida de Argentina, y como sólo sería un dia en Brasil, no hacia falta pasar por la aduana.
Tanto la entrada en Brasil como la de Argentina costaba 40 pesos para los extranjeros, sólo que en Argentina el segundo dia de visia te hacian un 50% de descuento, pero claro, para eso cerraban el parque sobre las 4 pm.
No sabría decir cual me gustó más, ya que eran iguales y a la vez diferentes. La de Brasil, no habia tanto turista. Se podía caminar por la ruta fácilmente y se veían iguanas, miles de mariposas diferentes, y algunos animales más los cuales no recuerdo su nombre. Las cataratas por supuesto eran suepr bonitas, gigantescas, y se podía llegar hasta al mitad del rio caminando sobre una pasarela, donde se veía bien la "garganta del diablo".
La de Argentina tambien fue muy bonita, pero continuamente te encontrabas con gente y a veces resultaba bastante dificil caminar. No se veía tantos animales, pero aún así estuve muy bien. Para ir a las de Argentinas cogimos la guagua de la compañía El practico, que costaba 5 pesos por trayecto. La entrada incluía el tren que te llevaba hasta el principio del camino donde empezabamos los viajes por las cercanías de las cataratas. En medio se encontraba la Isla San Martin, pero no fuimos porque entendimos que costaba otros 35 pesos y ya se nos hacia mucho, pero resultó que era gratis.
Para ir a la parte de Brasil, había que coger otra compañía que salía de la misma estación, pero costaba 3 pesos por viaje. Luego al llegar a la aduana te recogía otra y te llevaba hasta la entrada. Allí pagamos, y comenzamos nuestras caminatas durante unas 5 horas.
Me gustaron mucho las dos. Si me preguntaran cuál les recomiendo, no sabría decirles porque creo que lo mejor es ir a ver las dos. La de la parte de Brasil se puede visitar con más tranquilidad, pero la de Argentina tambien es muy bonita.
Uno de los dias fui a la peluquería y me corté el pelo. No me gusta mucho como lo tengo ahora porque me lo dejó demasiado corto, pero con un poco de paciencia crecerá pronto. Me costó 12 pesos el pelado, osea, unos 3 euros.
El último dia en Puerto Iguazú no teníamos mucho que hacer, y se nos ocurrió dar un salto a Ciudad del Este en Paraguay. Es muy famoso porque no se pagan impuestos y dicen que todo lo de electrónica, como las cámaras y cosas así, se venden muy baratas. No nos lo pareció a nosotros. Eran igual de caras, con eso de no pagar impuestos suben más los precios y aunque negocies no vale la pena. Además yo no tenía ganas de negociar, y por lo que veía ellos tampoco.
Pasamos unas 4 otras en la ciudad. Mientras esperábamso la guagua, oí un golpe y una mujer gritando. Un señor gordete le había quitado unas joyas de la tienda y había salido corriendo con ellas. Derrepente y en menos de 1 segundo se corrió la voz por el pueblo y todos los hombres salieron y lo inentaron rodear. Finalmente lo atraparon, pero fue increíble porque eran como 30 personas agarrando al ladrón y llamando a los policías que estaban pro allí cerca. Lo consiguieron coger y lo medi oescondieron entre dos coches, y un policía que había vestido de paisano lo puso de rodillas en el suelo, y él y dos más le dieron unos cuantos puñetazos en la cara para que se acordara. Luedo, humilldo por los silvidos y gritos de la gente, con la cara toda roja y la cabeza agachada s lo llevaron a comisaría. Me pareció increíble lo que hizo el pueblo, y me pareció muy bien lo que le hicieron al gordete. Le dieron unos cuantos puñetazos para que se acordara. Yo creo que es mejor eso que un par de meses en la cárcel. Ahora que salga y vaya a robar otra vez. Probablemente se lo piense dos veces. Pregunté a varias personas y por lo visto la justicia es así allí. Cuando alguien ace algo así la mayoría de las veces lo atrapan y le pegan. Y luego se lo llevan a comisaría.
Les dejo las fotos de Iguazú por la parte de Brasil.
Salu2.